Msc: Eduardo López. Miembro del Consejo de Facultad UNAN FAREM
Estelí.
I-Introducción:
La responsabilidad que la
universidad tiene en este cambio de época que vivimos, signada por la sociedad
del conocimiento y la información es
mayúscula, me refiero a la universidad pública, es decir la Casa de Estudios que esta de cara a los problemas estructurales del país, que
esta de cara al Plan Nacional de Desarrollo Humano y digo esto, porque en ella
se preparan los profesionales en distintas disciplinas que asumirán responsabilidades en el sector público
y privado en diferentes áreas, programas y proyectos.
No es una tarea fácil, pero
tampoco imposible para la universidad ser vanguardia en los planes presentes y
futuros del desarrollo nacional, tenemos que partir del hecho de ser una casa
de estudios que su tarea fundamental es hacer ciencia, es gestionar
conocimiento y hacerlo con responsabilidad, porque se trata de responder a las
exigencias de este cambio de época que hoy enfrentamos y como señala Philip
Coombs: “ las universidades no tienen otra opción real sino atender nuevas
necesidades porque, si dejan de hacerlo, se hallarán otras maneras de atender
estas demandas y las universidades que funcionen mal y no respondan a estas
presiones terminarán, como los dinosaurios, siendo piezas de museo.
La universidad pública es desde
la perspectiva educativa un pilar muy visible para estructurar propuestas de
cambio que de forma integral permitan la forja del ser, de una sociedad más
humana, de una nación para todos y esto tiene su fundamento porque la
universidad debe ser siempre fuente de las ideas, promotora y ejecutora de
propuestas de cambio, promotora de valores, en fin, una institución impregnada
de ciencia y de conciencia, impulsora de un aprendizaje permanente como lo
demandan estos nuevos tiempos, este mundo contemporáneo muy desigual que
requiere propuesta novedosas de cambio, donde la universidad no puede estar al
margen, precisamente por ser universidad.
II--Docencia, investigación y extensión, ejes fundamentales del
quehacer universitario.
La docencia, la investigación y
la extensión, conforman una unidad dialéctica fundamental en las tareas
educativas de la universidad, la puesta en práctica de estos tres ejes de
manera creativa, con visión holística, debe permitir la forja integral de los
educandos, el crecimiento endógeno de la universidad y una proyección exógena
que demuestre porque la universidad es
una depositaria esencial de los planes de desarrollo de la nación.
Estos tres ejes cumplen su
función particular, pero a la vez están totalmente entrelazados, en procura de
lograr una educación con pertinencia a la altura de estos tiempos de rápida
obsolescencia del conocimiento y de un aprendizaje permanente.
En momentos en que estamos
llevando adelante una transformación curricular, nuestras propuestas
curriculares, planes de estudio, etc. deben estar cruzadas transversalmente por
temas como:
-Medio ambiente.
- Producción intensiva de
calidad.
-Desarrollo de energías
renovables.
-Combate a la pobreza.
-Estado nacional vs
globalización.
-Ciencia, tecnología e
innovación.
-Integración y solidaridad.
-Soberanía alimentaria.
-Seguridad alimentaria.
-Gestión de riesgo.
El conocimiento, los problemas
estructurales, la necesidad de respuestas concretas demandan de nuestra
universidad su aporte como máxima casa de estudio, porque es donde se hace
ciencia, se investiga alrededor de los problemas más sentidos de la sociedad,
del país.
-Este foro que es parte del
programa del encuentro de jóvenes que analizan los problemas de seguridad
alimentaria en nuestros países, es un momento importante para reflexionar desde
nuestra universidad y asumir compromisos en materia de docencia, investigación
y extensión con relación a este estratégico tema como es la seguridad
alimentaria, que además tiene que ver con soberanía, cultura, salud, educación,
pobreza, etc. es decir abarca muchos tópicos que como académicos, como
estudiantes no los podemos obviar.
La seguridad alimentaría es un
objetivo estratégico de primer orden que debemos alcanzar, en aras de asegurar
el bienestar de la población y el desarrollo de la nación. ¿Porque los países
como Nicaragua, que es de vocación agrícola padece de hambre? ¿Por qué tanta
inseguridad alimentaría? ¿ Porque la desnutrición infantil?. Las injustas
estructurales económico-sociales que han imperado en nuestro país por siglos
son las causantes de que gran parte de la población sufra de hambre, habiendo
incluso muchas tierras ociosas que deberían servir para la producción de
alimentos.
¿Y la soberanía Alimentaria? La
soberanía alimentaría juega un papel determinante vista desde el punto de vista
de la autodeterminación de los pueblos, la soberanía alimentaría implica
también identidad, porque esta soberanía es el derecho de los pueblos, de los
países a definir su política agraria y alimentaría sin presiones de ningún
tipo, sobre todo de las grandes potencias que siempre han incidido en el
destino de muchas naciones sobre todo las más pobres.
-En el artículo 63, de la Constitución
Política de la
República de Nicaragua
se indica: “Es derecho de los nicaragüenses
estar protegidos contra el hambre. El Estado promoverá programas que aseguren
una adecuada disponibilidad de alimentos y una distribución equitativa de los
mismos”.
-La
Política de Seguridad y Soberanía Alimentaria y Nutricional
desde el Sector Público Agropecuario y Rural, formulada por el Ministerio
Agropecuario y Forestal (MAGFOR), define la Seguridad Alimentaria
y Nutricional como “El estado de
disponibilidad y estabilidad en el suministro y acceso físico y económico de
alimentos nutritivos a todas las personas”.
En el capitulo I, numeral doce del Plan Nacional de Desarrollo Humano 2008-2012
(PNDH), referido a “Solidaridad, Soberanía y Seguridad Alimentaria, se
indica:
“El aumento de la demanda de
alimentos de países como la
India y China el aumento del uso de productos agropecuarios
para producir bio-combustibles, han llevado a
alzas agudas y sostenidas en los precios de los alimentos.
Esta crisis ha obligado a los países de revaluar el alto valor que tiene la
soberanía y seguridad alimentaria (siempre menospreciado por el neo-liberalismo
que receta libre comercio aún para los alimentos). La seguridad y la soberanía
alimentaria son necesarias para suplir las necesidades básicas de la población
y proteger sus ingresos ante las fuertes alzas e incluso para proteger la
gobernabilidad. Esto es demostrado por el alto grado de tensión que existe en
algunos países recientemente debido a las alzas de precios y escasez de
alimentos.”
a) Disponibilidad: Se refiere a la oferta o suministro de
alimentos de la canasta básica. A consecuencia de esto, la inestabilidad de la
oferta de alimentos de la canasta básica es una causa de inseguridad alimentaria,
no sólo por el efecto coyuntural que tiene sobre la suficiencia, sino por el
efecto que tiene sobre el precio de los alimentos. Así, la disponibilidad de
alimentos puede verse afectada por el comportamiento de la producción y por los
factores que determinan que la producción sea estable y permanente.
El Suministro Energético Alimentario (SEA) segúnla Cuarta Encuesta de
Consumo de Alimentos de Nicaragua (2004, IVENCA), mostró que alrededor del 75%
de los hogares encuestados no alcanzó un nivel de disponibilidad energética
suficiente y que el 50% de los hogares se encontraba en niveles deficiente y
crítico.
El Suministro Energético Alimentario (SEA) según
b)Acceso: Engloba que toda la población
pueda adquirir los alimentos que necesita sin interrupciones, lo cual depende
del poder adquisitivo para comprarlos si no los produce, que exista la
infraestructura y el transporte para viabilizar su traslado y la existencia de
canales de distribución adecuados.
c) Consumo: El consumo tiene que ver con la
capacidad de ingerir alimentos que permitan tener una dieta balanceada. Sin
embargo, depende de la capacidad de acceso, conocimientos, actitudes y
prácticas para elegir los alimentos adecuados, las formas de preparación y el
uso de la lactancia materna exclusiva y complementaria en el caso de los niños
pequeños.
d) ) Aprovechamiento Biológico: Los principales factores que
inciden en el aprovechamiento biológico de los alimentos están dados por la
calidad de la alimentación, donde el volumen de alimentos es percibido por la
población como el ideal; sin que este obedezca al valor nutricional requerido.
Además, las deficientes condiciones higiénicas sanitarias y el bajo nivel
educativo nutricional son limitantes adicionales que condicionan el
aprovechamiento de los alimentos.
-Considero que hay que analizar la seguridad alimentaria en sentido
estricto y en sentido amplio, en el primero, lo veo desdel punto de vista de
las familias, de las parcelas, del patio, de lo que consumen, de lo que no
consumen, de la idolatría a la comida chatarra, de las buenas prácticas de
seguridad alimentaria.
-Veo la seguridad alimentaria en
sentido amplio, desde la perspectiva de la producción nacional, desde el Plan
Nacional de Desarrollo Humano (PNDH), desde
los problemas estructurales de la misma, con niveles de producción de los
años sesenta, somos importadores de hortalizas, de arroz, nuestras vacas
producen menos de cuatro litros de leche por vaca, poca producción y grandes
cantidades de tierra ociosa, etc.
La seguridad alimentaria la
debemos tomar como un eje transversal en nuestra universidad, porque es un tema
que engloba muchos tópicos que incide en la mayoría de las carreras de nuestra
universidad.
-¿Acaso un estudiante de
educación infantil, no debe estar claro que los problemas de asimilación de
contenidos por parte de los niños muchas veces es porque llegan subalimentados
a la escuela?
-Hoy se vuelve una necesidad
apremiante que nuestros maestros y estudiantes de las carreras de ciencias de
la educación conozcan y manejen neurociencia,
porque se tienen que dar cuenta sobre el comportamiento integral de los niños
en su proceso de aprendizaje, que no dudamos esta ligado a su desarrollo, al
entorno social en que se han desenvuelto que muchas veces esta lleno de
carencias que tenemos que comprenderlas, pero sobre todo analizarlas,
estudiarlas científicamente y eso solo es posible desde la universidad.
-¿Como no va a entender un
estudiante de Ciencias Sociales que los problemas de la pobreza, muchas veces
están ligados a factores de orden cultural, a un subdesarrollo mental? Como soy pobre, nací pobre, voy a morir pobre. No tengo que
comer, con costo frijoles y arroz.
-El estudiantes de ingeniería
industrial esta en capacidad de enseñarle a la gente, al campesino, al pequeño
industrial, como se le da el valor agregado a los alimentos.
-¿No estará en capacidad el estudiante de contabilidad, de
administración de empresas, de mercadotecnia, de poner en práctica sus
aprendizajes, enseñándole a los productores de manera sencilla como calcular
sus costos de producción? ¿Desarrollar prácticas de emprendedurismo? ¿Que
garanticen su seguridad alimentaria, pero también su seguridad económica?.
-Yo creo que también hoy se hace
necesario presentar nuevas variables para medir el PIB, entre ellas, la
seguridad alimentaria, y desde nuestra universidad podemos contribuir a eso,
porque una población que consume las calorías suficientes, trabaja más y desde
luego aporta a la producción a la productividad y eso eleva el PIB.
-Y los estudiantes de ciencias
ambientales?. Tienen una enorme responsabilidad. Hoy la seguridad alimentaria
esta relacionada con temas ambientales, contaminación de agua, usos de
pesticidas, deforestación, manejo del suelo, manejo de microcuencas,
transgénicos, etc. ¿Nos hemos preguntado en la universidad, como poder
conciliar los intereses rentistas de los productores, con los compromisos
ambientales?
-¿Qué lectura hace la universidad
de los objetivos y metas del milenio, donde uno de los objetivos es erradicar
la pobreza y el hambre? ¿Será posible alcanzar ese objetivo, con las asimetrías
que presenta el mundo, con el calentamiento global, con la crisis del petróleo,
etc. Desde una perspectiva interdisciplinar tenemos que estudiar esta realidad
y proponer soluciones concretas.
-Solamente con una docencia donde
predomine la construcción social del conocimiento y los aprendizajes sean
significativos y donde el maestro evolucione como recomienda Freire “de educador bancario a educador
problematizador”, donde la investigación se
transforme cada día en la manera de ser
de la pedagogía universitaria, y donde la extensión universitaria proyecte el desarrollo cultural, la transferencia
científica y tecnológica, la divulgación científica, la realización de
servicios y toda actividad tendiente a consolidar la relación entre la Universidad y el resto
de la Sociedad ,
solamente de esa manera se estarán estableciendo bases sólidas, de una
universidad fortalecida en su quehacer interno y prestigiada en su proyección
exterior.
En la pagina web de UNIVERSIA se indica que: “La Universidad en virtud de su pertinencia social
debe procurar que la docencia, investigación, extensión y servicios contribuyan
a reducir algunos de los dramáticos indicadores sobre pobreza extrema, a
mejorar las condiciones del medio ambiente y a promover un acceso de la
población a condiciones de vida más dignas. La responsabilidad social
universitaria no puede estar ajena al cumplimiento de las metas de desarrollo
del Milenio, por lo que debe favorecer al desarrollo humano en su concepto más
amplio a través de la reorientación de su visión y sus misiones básicas”.
III-La universidad y su
aporte al desarrollo comunitario, una alternativa de humanizar el conocimiento,
de popularizar la ciencia.
Vivimos en la sociedad del
conocimiento, pero ¿De que sirve el conocimiento si no se realizan
transformaciones en la sociedad? ¿ De que sirve una universidad que este de
cara al conocimiento y de
espaldas a la realidad? La Reforma Universitaria
de Córdoba nos dio importantes lecciones sobre la vinculación de la universidad
con la sociedad hace noventa y cuatro años, no obstante y reconociendo el
significado histórico de Córdoba, vivimos un mundo contemporáneo más complejo,
globalizado, asimétrico, real y virtual, con desequilibrios ambientales, con
problemas energéticos, pero también con incertidumbres racionales, con utopías, con esperanzas, en fin, en la
dialéctica de la vida, donde las universidades, tienen un papel protagónico en
la búsqueda de nuevos derroteros por un mundo mejor y en ese camino, humanizar
el conocimiento, es un reto mayúsculo, porque se trata de vincularlo a la
realidad, pasar de la teoría a la acción, contribuir a la solución de los
problemas estructurales de la sociedad y concretamente y en primer lugar atacar
la pobreza como un flagelo que se debe erradicar.
Humanizar el conocimiento es
desarrollar como dice Paulo Freire “la pedagogía de la esperanza” que en
palabras del educador significa: “ inyectar en esa gente desesperanzada el interés, las
intenciones de superación, los sueños, y esto,
es posible mediante la educación y la forma de llevarla a cabo. Por eso
surge La Pedagogía
de la Esperanza
donde se habla de ello, donde se le quita la etiqueta de responsables del
atraso y del fracaso a los atrasados y los fracasados, donde se propone revisar
las estructuras sociales y sus mecanismos; donde se pretende acercar el modo de
visualizar el mundo dentro de la escuela con el modo con que se ve desde fuera
de ella; donde se toma en cuenta el recorrido sociocultural del educando y no
se intenta la manipulación del profesor sobre él”.
¿Acaso el conocimiento no se
humaniza o no se populariza la ciencia cuando el trabajo educativo se nutre de
la realidad y da respuestas a esa realidad? Para nuestras universidades es
impostergable ambas cosas, porque debemos hacer
ciencia para el desarrollo, para romper con las injustas estructuras
socio-económicas que han predominado en nuestras sociedades y que se reflejan
en indicadores alarmantes como la desnutrición infantil, o el déficit en la ingesta de calorías de nuestra población.
Es la lucha también contra un
mundo globalizado, de visibles diferencias entre el norte y el sur, como bien
lo describía en 1999, en un ejercicio ese brillante intelectual mexicano recién
fallecido Carlos Fuentes: “Si pudiéramos reducir la población de la tierra a una
aldea con sólo cien habitantes pero con los mismos porcentajes humanos
actuales, obtendríamos el siguiente resultado: habría cincuenta y siete
asiáticos, veintiún europeos, catorce habitantes de las Américas y ocho
africanos. La mitad de la riqueza total del mundo estaría en manos de sólo seis
personas. Las seis serían de nacionalidad norteamericana. Ochenta vivirían en
casas de calidad inferior. Setenta serían iletradas. Cincuenta vivirían desnutridas.
Una estaría a punto de fallecer y otra a punto de nacer. Sólo una entre las
cien personas tendría educación universitaria y ninguna tendría computadora.”
Comentando lo expresado por
Fuentes, Julián Betancourt, de la
Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional
de Colombia, indica: “ Lo anterior muestra de manera dramática los enormes
desequilibrios del mundo globalizado actual en donde C&T, (ciencia y
tecnología), como ya se dijo, se han convertido en factores de dominación y
permite intuir los gigantescos esfuerzos, lúcidos y creativos, de toda índole,
que deben hacerse para convertir la ciencia y la tecnología en factores reales
de desarrollo integral y armónico del individuo y de desarrollo económico y
social de nuestros países. He ahí un gran reto para el Siglo XXI. En donde la
popularización de la ciencia y la tecnología debe poner su grano de arena.”
IV- Gestionar
Conocimientos una tarea impostergable de la universidad
Tenemos un enorme reto como
estudiantes, como profesionales, como miembros de la comunidad universitaria, en cuanto a elevar la calidad de la educación,
en este sentido, gestionar el
conocimiento, implica elevar nuestros niveles de formación, de investigación,
de establecer colectivos científicos haciendo uso de la multidisciplinariedad,
de la interdisciplinariedad, que nos encaminen no solo a encontrar la verdad,
sino que también hacerla realidad a través de la praxis.
Nuestros colectivos de trabajo,
nuestras comunidades de aprendizaje, serán sostenibles en la medida que sean
capaces de crear, de tener iniciativa en cuanto a problematizar, analizar,
indagar, reflexionar, proponer, innovar etc.
La obsolescencia lleva a la insostenibilidad. Nuestro desarrollo
cultural, académico, técnico, científico debe ser producto de nuestro
desarrollo mental, de aprendizajes significativos, de construcción social del
conocimiento.
La cultura organizacional es
clave para viabilizar procesos dentro de la organización, o dentro de las
organizaciones, a lo interno de la universidad, que nos permita gestionar conocimiento, es
decir, darle el principal valor agregado a nuestro trabajo intelectual, a
nuestra investigación compartida, a nuestro trabajo en equipo, pero que al
final tenga beneficios tangibles para la sociedad.
No podemos entender la
universidad del siglo XXI sin gestionar conocimiento, sobre todo porque estamos
en un mundo en que el conocimiento avanza vertiginosamente y se requieren
respuestas científicas y pertinentes para el quehacer académico en nuestra
máxima casa de estudios, pero también para proponer soluciones integrales a la
realidad social, económica, productiva,
cultural y política en que vivimos, de no hacer esto, seremos superados por la
post universidad como señala : Cristovam Buarque: “Para el tercer milenio, ella deberá cambiar, no apenas
ajustándose, sino transformándose realmente, para responder a la nueva realidad
técnica y a las nuevas exigencias que el mundo impone a las ideas. De lo
contrario, una nueva entidad surgirá: una post-universidad. El mundo asistirá
al surgimiento de esa entidad, que pasará a existir paralelamente a la
universidad, de la misma forma que convivieron convento y universidad. Esta
perderá la importancia que tuvo en los últimos diez siglos. Su capacidad de generación, de saber superior, será superada por la nueva
institución, así como sucedió con los conventos, rendidos por la universidad.”
Una sólida gestión del
conocimiento también se sustenta en una gestión de alianzas, en este sentido,
en este foro nos hemos reunido docentes, estudiantes y autoridades de
diferentes países, que con preocupación estamos analizando la problemática alimentaria
de nuestras naciones y entre todos
tratamos de buscar alternativas de
solución a los distintos problemas que enfrentamos y este esfuerzo nos debe
llevar a formar comunidades de aprendizaje, colectivos científicos u otras
formas de organización donde se gestione conocimiento permanentemente
fomentando la cultura organizacional al interior de nuestra universidad, pero
también aprovechando los medios que hoy
nos pone a disposición el ciberespacio y que tenemos que explotarlo cuando se
trata de gestionar alianzas como las que desde ya deben surgir de este foro.
Con el privilegio que tenemos de
acceder al conocimiento, de gestionarlo, nos queda el compromiso de compartirlo
y como señalaba el Ex Director General de la UNESCO Koichiro Matsuura: “El aprovechamiento compartido del
conocimiento no debe limitarse a la creación de nuevos conocimientos, la
promoción de los conocimientos de dominio público, o la reducción de la brecha
cognitiva. Ha de suponer un acceso universal al conocimiento, así como una
participación activa de todos. Por lo tanto, será la clave de las democracias
del mañana, que han de basarse en un espacio público de nuevo tipo en el que
tendrán lugar verdaderos encuentros y debates con una participación de la
sociedad civil, permitiendo así tratar los problemas de la sociedad con una
óptica prospectiva.”
Compartamos el conocimiento para
trasformar este mundo de injusticias en que vivimos, derrotemos la pobreza y el
hambre y como dice Paulo Freire: “El hombre
es hombre y el mundo es mundo. En la medida en que ambos se encuentran en una
relación permanente, el hombre transformando al mundo sufre los efectos de su
propia transformación.
Finalmente quiero invitar a los
presentes en este foro, a analizar los resultados de la cumbre de Río de
Janeiro, que tienen que ver con el tema de la seguridad alimentaria, que dicho
sea de paso, estos resultados no llenan las expectativas de muchos países,
considero necesario su valoración.